sábado, 30 de mayo de 2020

Jengibre



TIENE 8 COMPUESTOS PROTECTORES DEL HIGADO, EXCELENTE ANTIINFLAMATORIO, ADEMAS DE SER FUNGICIDA PUES POSEE ÁCIDO CAPRÍLICO, EL GINGEROL Y EL SHOGAOL QUE AYUDAN A COMBATIR LAS TOS, ALIVIAN EL DOLOR Y LA FIEBRE


Es una planta de la familia de las zingiberáceas, y crece como rizoma horizontal;. Es comúnmente usado como una especia, que no solo imparte sabor al alimento, sino que además evita la peroxidación lipídica. Los rizomas de jengibre se han utilizado en la práctica medicinal herbal para el tratamiento de una variedad de enfermedades como la artritis reumatoide, hipercolesterolemia, enfermedades neurológicas, asma, estreñimiento, diabetes o cáncer, en forma de pasta fresca, seco en polvo, cristalizado o en almíbar.

 

La función antioxidante de este alimento desempeña un papel esencial en la protección frente a los fenómenos de daño oxidativo, y tiene efectos terapéuticos en un elevado número de patologías, incluyendo la cardiopatía isquémica o el cáncer, debido a esto se puede considerar al jengibre como un alimento funcional.

 

Dentro de los antioxidantes presentes en el jengibre, se encuentra el grupo de los polifenoles. Estos son el grupo más extenso de sustancias no energéticas de los alimentos vegetales y en los últimos años se ha demostrado que una dieta rica en polifenoles puede mejorar la salud.

 

Debido a que es normalmente usado como condimento en cantidades reducidas, es propicia la obtención de un extracto de jengibre o también capsulas, como una nueva forma de aprovechar sus propiedades de manera concentrada.

 

Principios activos

 

Aceite esencial (0,3%-3,3%): compuesto de zingibereno (60%) y β-bisaboleno. También contiene dextrocamfeno, felandreno, metilheptenona, cineol, geraniol, linalol, citral, borneol, β-bisabolona, (EE)-α-farneseno y β-sesquifelandreno, α-curcumeno y zingiberol (principal causante de su carácterístico olor), así como aldehídos dicíclicos y monocíclicos.

 

 Propiedades y usos comunes

 

Sistema digestivo: el jengibre estimula los receptores termosensibles del estómago y provoca una sensación gástrica de calor, propiedad que se aprovecha en el tratamiento de las gastralgias, la acidez de estómago y la dispepsia producida por esta causa. Aumenta el peristaltismo de los intestinos, así como el tono de su musculatura, y se ha empleado en la flatulencia habitual, la dispepsia atónica, las náuseas y en casos de dolores cólicos de estómago e intestinos. La estimulación de la motilidad se ha relacionado con los gingeoles y sogagoles. En la boca es sialagogo: estimula la producción de saliva y aumenta en ésta la concentración de ptialina (amilasa) y mucopolisacáridos (mucina). Tiene propiedades antiulcerosas que pueden explicarse por su capacidad de inhibir el crecimiento de Helicobacter pylori.

 

Cuando se administra conjuntamente con claritromicina, la acción de ésta se ve potenciada. Además, también se ha visto que puede ser un fuerte inhibidor de la bomba de protones.

 

Sistema respiratorio: los emplastos de jengibre son útiles en el tratamiento del resfriado común para mejorar la producción de esputo. El extracto alcohólico también estimula el centro vasomotor, el respiratorio y la función cardíaca.

 

Sistema nervioso: se ha comprobado que el jengibre es útil en el tratamiento del mareo del viajero, mucho mejor que el dimenhidrinato. Su efecto, sin embargo, no se ejerce sobre el sistema nervioso sino en el tracto gastrointestinal, donde actúa como carminativo, aromático y digestivo. Los emplastos de esta planta, aplicados sobre las sienes, pueden aliviar el dolor de cabeza simple y la migraña. Ya que actúa como rubefaciente, es útil en los dolores reumáticos.

 

Inhibidor de las prostaglandinas y de la agregación plaquetaria: diez pacientes con arteriopatía coronaria fueron tratados con 4 g durante 3 meses, y los resultados indicaron que a largo plazo el jengibre no tiene efectos sobre la agregación plaquetaria ni la concentración de fibrinógeno. De todas formas, una sola dosis de jengibre (10 g) produjo una reducción significativa de la agregación plaquetaria, en comparación con los pacientes que recibieron placebo.

 

Antiemético: tras varios estudios, realizados en marinos y en pacientes durante el postoperatorio, no parece que se haya llegado a ninguna conclusión estadísticamente significativa. De todos modos, en mujeres embarazadas se observó que aquellas que habían tomado jengibre referían tener menos náuseas que las que recibieron placebo. También se ha observado este efecto en pacientes que sufrían náuseas causadas por quimioterapia o radioterapia.

 

Reducción del vértigo: un estudio doble ciego llevado a cabo con ocho voluntarios sanos que tomaron 1 g de polvo de raíz de jengibre halló que éstos tenían menos vértigo que los que tomaron un placebo.


Antiinflamatorio: disminuye la síntesis de prostaglandinas mediante la inhibición de la ciclooxigenasas 1 y 2. También disminuye la producción de leucotrienos por la inhibición de la lipoxigenasa 5. En siete pacientes con artritis reumatoide se observó una disminución del dolor articular, así como una mejora en el movimiento. También se usa en la fórmula de numerosos enjuagues bucales, gargarismos y medicamentos de uso dentario.


Anticancerígeno: se ha visto que tiene un efecto quimiopreventivo en el inicio del cáncer de colon en ratas. También se ha comprobado que modula la secreción de factores angiógenos en células de cáncer de ovario.